Mrkeyboard escribió: Un actor profesional es capaz de hacer reir si su personaje es cómico aunque esté regresando de un funeral de alguien cercano directo a la sala de teatro, y eso no es un ejemplo sacado al vuelo, lo he leído de algunos actores o actrices.
Eso es sin duda cierto. En el grupo argentino de música y humor Les Luthiers, uno de sus componentes salió a actuar el mismo día del entierro de su hermano; y cuando él mismo falleció (Daniel Rabinovich), en 2015, sus compañeros dieron también funciones los días siguientes a su muerte. Esto, que puede parecer incomprensible, y aquí engancho con el piano, sus tics, los buenos y los malos días, ellos lo explican diciendo que, lejos de ser un acto difícil, se convierte en un modo de terapia, es decir, la pena, los problemas, absolutamente todo desaparece cuando salen a escena; del mismo modo, ¿no es tocar el piano una actividad que, aunque suene cursi, queda lejos de todo lo demás, se convierte en un refugio aparte? Yo, que aún ando con ejercicios de parvulario, no puedo decir que "toco el piano", pero sin duda sentarme ante el teclado y la partitura constituye un acto que me gusta y me calma, incluso a pesar de que me pueda poner nervioso tocando, estoy seguro que comprendéis perfectamente esta aparente contradicción.
Y, por cierto, en momentos de mucha tensión aprieto los dientes, algo que trato de evitar.
