Buen ejemplo has puesto con los idiomas. La forma usual y académica de aprender un idioma yendo a clases es un buen ejemplo de aprender mal. Por ejemplo, ir a una acedemia de inglés a estudiar una hora al día más lo que se dedica en casa es una forma bastante ineficiente de aprender inglés. Es mucho más eficaz irse a un pais donde lo hablen, hacer una inmersión linguística, apoyarla con clases y pasarse unos años hasta que hables bien el idioma. Lo que pasa que es que la gente no puede hacer eso, o no quiere, y escoge el sistema menos eficaz de ir a una academia, ver películas y series en inglés, practicar cuando puede etc. y el resto del tiempo dedicarse a trabajar, cuidar la famila etc. Se trata de un equilibrio entre necesidades y recursos. La diferencia con el piano es que al que va a la academia nadie le va por atrás diciendo que pierde el tiempo y poniéndole vídeos de gente que habla mal en inglés por estudiar mal.ferpiano escribió:Yo creo que el problema es que con la palabra "aprender" no entendemos lo mismo. ¿Hasta qué punto uno ha aprendido a hacer algo? ¿Cuándo uno puede decir que ha aprendido un idioma? Yo creo que en este caso, como en los idiomas, se debe hablar de objetivos conseguidos o niveles. Uno puede decir que tiene el A1 de inglés, el 2 o el 3, etc. Y en cada uno de esos niveles hay una serie de objetivos que aprender e interiorizar. Yo creo que en el caso de los instrumentos musicales (en general) es lo mismo. Teniendo en cuenta, además, de que no hay un solo "estilo" de música sino que hay pianistas de jazz, de rock, clásica, etc. Al igual que con los idiomas uno puede ser autodidacta o decir que con aprender a hablarlo y ya está eso es suficiente y no hace falta tanta teoría ni tontería. O igual uno puede optar por una formación reglada. Tan sólo son distintas opciones. La diferencia es que cada vez tenemos acceso a más recursos audiovisuales y eso nos permite acceder a conocimientos a los que antes no se podían acceder si no era de otra forma.
Repecto a lo que podamos entender por aprender, eso depende de los objetivos y necesidades de cada uno. Tú puedes poner el listón en ser un competente pianista, pero ese listón sólo te sirve para ti mismo y no tienes porque exigirlo a nadie más, aun menos despreciarlo. Podrás quejarte de que alguién que se califique a si mismo como pianista competente toque mal, pero no puedes exigirlo a nadie que quiera tocar el piano. Este creo que es el meollo de la discusión, en lo que ha derivado.