Nervios excesivos en público
- burgmuller
- Rompeteclas | Moderadora
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Re: Nervios excesivos en público
Yo he hecho yoga durante 10 años y he de decir que para esto a mi no me sirve. Lo cual no quita para que venga super bien y sea una forma de cuidar el cuerpo, pero no hace esos milagros...
Re: Nervios excesivos en público
A mi también me preocupaba mucho el tema de la ansiedad escénica. Me daba muchísima rabia que una obra que tenia al 100% estudiada luego no se plasmara de esa manera. Leí algún libro, pero a mi personalmente no me aportó mucho. Pienso que los miedos se vencen a base de exposición y de mucho estudio...es todo un ciclo si se tiene bien estudiado se va con más seguridad. A mi cuando me preocupaba tocar cierta obra reunía a familiares o amistades que vinieran a casa y les tocaba la obra y así creaba un clima similar al día de la audición/concierto. También ayuda mucho el grabarse porque se toca con otro tipo de tensión.
Por otra parte, hay que tener en cuenta que lo más seguro es que se falle en alguna nota, pero eso no es sinónimo de desastre, siempre hay que seguir y la mayoría de las veces el público ni lo nota.
Yo creo que es la clave...mucho estudio, ensayar la obra ante gente y lanzarse...al final será algo mucho más llevadero y no se asociará a algo negativo.
Mucha suerte!
Por otra parte, hay que tener en cuenta que lo más seguro es que se falle en alguna nota, pero eso no es sinónimo de desastre, siempre hay que seguir y la mayoría de las veces el público ni lo nota.
Yo creo que es la clave...mucho estudio, ensayar la obra ante gente y lanzarse...al final será algo mucho más llevadero y no se asociará a algo negativo.
Mucha suerte!
- mikrokosmiko
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Re: Nervios excesivos en público
Yo en 8º de carrera estuve a punto de dejarlo por un par de audiciones DESASTROSAS. En mi caso lo superé por saturación: le dije a mi profe que me apuntara a todas las audiciones restantes del curso, y a pesar de que lo pasé muy mal, se me fue pasando. Digamos que llega un momento en que dejas de ver la interpretación en concierto como algo "especial" (especial en el sentido de una ocasión importante que ocurre de uvas a peras) y más como algo "rutinario". Ahí fue cuando superé yo el miedo escénico.
Ahora que soy profe pienso que esa fue una forma bastante temeraria de enfrentar el problema. Tal como lo veo yo ahora, el estudio técnico-interpretativo de una obra es una cosa que no tiene absolutamente nada que ver con subirse a un escenario. Me explico: durante los estudios normalmente estamos siempre al límite, porque a medida que subimos de nivel, también lo hace la dificultad de las obras. Entonces, dado que la interpretación en público tiene unos problemas que no tienen que ver con la preparación de la obra en sí, creo que lo suyo sería practicar específicamente el subirnos al escenario, con obras "fáciles", o que estén por debajo de nuestro nivel actual. Porque el problema que veo en los alumnos es que están demasiado preocupados por este o aquel pasaje, la velocidad, que falle la memoria... cosas que no pasarían con obras que les resultaran más sencillas, de forma que no estuvieran tan al límite técnico.
Total, para resumir, que hay que hincharse de tocar cosas fáciles delante de todo el mundo para poco a poco ir superando el miedo e ir cogiendo confianza progresivamente para que el estar sobre el escenario no sea una dificultad añadida.
Ahora que soy profe pienso que esa fue una forma bastante temeraria de enfrentar el problema. Tal como lo veo yo ahora, el estudio técnico-interpretativo de una obra es una cosa que no tiene absolutamente nada que ver con subirse a un escenario. Me explico: durante los estudios normalmente estamos siempre al límite, porque a medida que subimos de nivel, también lo hace la dificultad de las obras. Entonces, dado que la interpretación en público tiene unos problemas que no tienen que ver con la preparación de la obra en sí, creo que lo suyo sería practicar específicamente el subirnos al escenario, con obras "fáciles", o que estén por debajo de nuestro nivel actual. Porque el problema que veo en los alumnos es que están demasiado preocupados por este o aquel pasaje, la velocidad, que falle la memoria... cosas que no pasarían con obras que les resultaran más sencillas, de forma que no estuvieran tan al límite técnico.
Total, para resumir, que hay que hincharse de tocar cosas fáciles delante de todo el mundo para poco a poco ir superando el miedo e ir cogiendo confianza progresivamente para que el estar sobre el escenario no sea una dificultad añadida.
- beeutherlin
- Estudiante avanzado
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Re: Nervios excesivos en público
No me refiero a lo del spam, que fue feo, pero sí a que puede pasar en una pianista joven, que sienta que su nariz es grande y como al tocar siempre está de perfil, se sienta bastante mal. Yo tuve una amiga así. Finalmente la historia terminó en que obtuvo una beca de un año para perfeccionar sus estudios en Polonia, y pasado el año se quedó viviendo en Europa haciendo una espléndida carrera. Es bastante conocida ella. Eso sí, antes de viajar se operó la nariz
Una buena forma de calmar los nervios excesivos al tocar en público (examen, audición, concierto, etc.) es en no pensar los días previos en cómo nos irá. Preparar en casa la/s obra/s de manera tal que se acerquen a la mayor excelencia posible, pero sin pensar en los probables resultados. Y buscar sí o sí probar el piano en el que vayamos a tocar pasando las obras dos o tres veces. Esto ultimo nos sirve para ponernos en situación y que nada nos sorprenda en el día clave. El día del concierto estar en la sala con bastante anticipación para tocar los pasajes claves, pero no tanto como para cansarnos. Al menos eso era lo que me servía a mí.
Una buena forma de calmar los nervios excesivos al tocar en público (examen, audición, concierto, etc.) es en no pensar los días previos en cómo nos irá. Preparar en casa la/s obra/s de manera tal que se acerquen a la mayor excelencia posible, pero sin pensar en los probables resultados. Y buscar sí o sí probar el piano en el que vayamos a tocar pasando las obras dos o tres veces. Esto ultimo nos sirve para ponernos en situación y que nada nos sorprenda en el día clave. El día del concierto estar en la sala con bastante anticipación para tocar los pasajes claves, pero no tanto como para cansarnos. Al menos eso era lo que me servía a mí.
"Si las cosas que valen la pena fueran fáciles, cualquiera las haría" A. Quinn
Decímelo y lo recuerdo; explicámelo y lo entiendo; involucrame y lo aprendo
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- GonzaloZ
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Re: Nervios excesivos en público
Yo no creo que fueras temerario, pienso que fuiste valiente. Pensaste en dejar tus estudios, en darte por vencido, pero te negaste en rotundo, cogiste al toro por los cuernos, y te enfrentaste a lo que temías. Y acertaste. Lo cual no te quita la razón en lo que comentas después. Me parece muy interesante la idea de recurrir a piezas más fáciles que tu nivel cuando se toca en público para reducir los fallos e ir ganando confianza. Aunque tú lo hiciste a lo bestia; mataste dos pájaros de un tiro como se suele decir.mikrokosmiko escribió:Yo en 8º de carrera estuve a punto de dejarlo por un par de audiciones DESASTROSAS. En mi caso lo superé por saturación: le dije a mi profe que me apuntara a todas las audiciones restantes del curso, y a pesar de que lo pasé muy mal, se me fue pasando. Digamos que llega un momento en que dejas de ver la interpretación en concierto como algo "especial" (especial en el sentido de una ocasión importante que ocurre de uvas a peras) y más como algo "rutinario". Ahí fue cuando superé yo el miedo escénico.
Ahora que soy profe pienso que esa fue una forma bastante temeraria de enfrentar el problema. Tal como lo veo yo ahora, el estudio técnico-interpretativo de una obra es una cosa que no tiene absolutamente nada que ver con subirse a un escenario. Me explico: durante los estudios normalmente estamos siempre al límite, porque a medida que subimos de nivel, también lo hace la dificultad de las obras. Entonces, dado que la interpretación en público tiene unos problemas que no tienen que ver con la preparación de la obra en sí, creo que lo suyo sería practicar específicamente el subirnos al escenario, con obras "fáciles", o que estén por debajo de nuestro nivel actual. Porque el problema que veo en los alumnos es que están demasiado preocupados por este o aquel pasaje, la velocidad, que falle la memoria... cosas que no pasarían con obras que les resultaran más sencillas, de forma que no estuvieran tan al límite técnico.
Total, para resumir, que hay que hincharse de tocar cosas fáciles delante de todo el mundo para poco a poco ir superando el miedo e ir cogiendo confianza progresivamente para que el estar sobre el escenario no sea una dificultad añadida.